viernes, 16 de septiembre de 2011

Miro al cielo y suspiro. No hay nadie. No veo esa sombra que planeaba sobre todo.
Me entristece no haber aprovechado mejor el tiempo y haber reído más con aquella sombra.

Siempre lejana... siempre querida.

¿Quieres que te sea sincera, sombra Aviadora? ¿Quieres que al hablar sea sincera incluso conmigo misma?

Si, ya se te echa de menos.
Y admito, egoístamente, que me hubiera gustado hablar de algunas cosas contigo. Pero me pudo el miedo.

Miedo a que, te preguntarás. Y yo te lo diré.
Tengo miedo a mi voz.
Si yo hablo, al segundo, tengo a mil personas señalándome y gritándome por hablar... Si ellos hablan, no pasa nada, son angelitos. Tengo miedo de que de tus labios salgan lo que te metería vulgarmente por las orejas.

Ojalá algún día pierda mi miedo.
Sea por una ventana fría o tomando algo en el calor de una tarde de verano, me gustaría algún día hablar y hablar. De todo, de nada y de muchas cosas.

Aún así, sabes que aquí estoy.
Estoy en una isla.
Soy una cobarde.
Una gran cobarde que prefiere callar antes que gritar y señalar sin miedo.
Soy tan cobarde... que he llegado a ser falsa por no perder a gente que me rodea.

Pero me cansa todo ya.
Quiero señalar como lo hacen todos, cabrearme como cualquiera...
Admito que odio los gritos, peleas y malos rollos. Pero creo que sabré hacer las cosas suficientemente bien como para que no les pierda a todos.

Además. Hay gente que ya me perdió. Aunque palabras no se cruzaran.

Esas personas no tendrían derecho a volver hacia mi cabreados por mi... "actitud".
Sería de hipócritas. ¿No?

Y es más.
Éste, es mi mundo. Aquí mando yo.
Y no quiero que las personas a las que les importo una mierda me acompañen.

sábado, 10 de septiembre de 2011

Provocaste un efecto extraño en mi.

Algo que odié siempre, ahora intenta adueñarse de mi existencia.
Es un sentimiento horrible que no quiero que se me acerque.


Gracias. Por volverme una desconfiada.
Pero seré fuerte y lucharé.
No todos cojeamos con las mismas patas.

jueves, 8 de septiembre de 2011

¿Cómo podría yo hacer para aliviar ese dolor ajeno a mi, pero que aún así, impacta y llega a mi?

Es odioso solo mira
r...
¡YO QUIERO ACTUAR!